Gira il mondo, gira

El fin de semana arrancó con una sacudida. A estas alturas muchos ya os habréis enterado, porque las malas noticias vuelan y más en este mundo virtual. No iba a dar ningún detalle al respecto, pero Bea ha escrito algo tan bonito en su blog que os remito a sus palabras. De todas formas supongo que os iba a extrañar que no comentara nada de mi viaje a Bilbao,que como el propio BRD se ha pospuesto.

LLevo todo el fin de semana pensando en dos cosas. Por una parte en los afectos que pueden llegar a generarse en esta blogosfera en la que andamos inmersos. A muchos no os he visto ni os veré nunca. De otros conozco su voz. Y hay algunas a quienes he tenido el inmenso placer de conocer en persona. Pero es increíble lo cercanos que os siento a todos. Sé que estáis ahí,os necesito y os aprecio. Ni yo misma me lo explico muchas veces y puede parecer una locura que por lo que leo en vuestros blogs y por lo que me decís en el mío tenga un vínculo tan fuerte con vosotros. Por eso hay momentos como ahora en que me pesa la distancia y no poder más que tener palabras de ánimo y de cariño. Para las dos, un abrazo enorme.


Mi otra reflexión tiene que ver con la vida misma y sus contrastes. Jerez es en estos días una ciudad en ebullición, llena de color, de gente, de música...Voy andando por la calle y todo es alegría. Claudia lleva tres días pensando en el momento en que se colocará su traje de gitana y Pablo repite una y otra vez que cuando nos vamos para la feria.Cuando me acordaba de ellas era como un estremecimiento. Es lo que os he dicho antes, no nos hemos visto nunca pero las siento muy cerca.Y los sentimientos encontrados que he tenido este fin de semana eran como vaivenes que me llevaban de un lado a otro. Alguna vez he vivido situaciones extremas en las que a la vez tenía motivos para estar muy alegre y profundamente triste, por alguien que llegaba y alguien que se iba. Y uno se siente perdido en esa contradicción. Al final hay una realidad que acaba imponiéndose por muy duro que resulte: La vida sigue.

La vida sigue, y el mundo no se para. Hay que seguir adelante.