Y entonces darme media vuelta y seguir durmiendo.
Fotos: Irving Penn
Pero no. Me despertaron el despertador y los niños.Se acabó el puente. Se acabó la sensación de estar de fiesta. Con los amigos, con buena música,con ratos de charla, ratos de risas, ratos de confesiones. Buenos ratos.Y hoy estoy inmersa en este martes-lunes. Es raro. Ayer mi clásico síndrome del lunes fue síndrome del martes. Pero si hoy es martes, en tres días ya es viernes.¡Adoro los puentes y empezar la semana con esta reflexión!.
Como dice mi paisano José Mercé en su canción, puentecito santo, santo puentecito.Sólo faltó que hubiera sido de los de cuatro días. Por qué será que siempre queremos más. Siempre saben a poco esos días de descanso y disfrute en los que uno siente que la vida sale a su encuentro, que la tiene enfrente.
9 comentarios:
no te falta razón, la reflexión de que en cuatro dias es viernes creo que es crucial para empezar la semana!
un beso
Pues cierto es todo lo que has contado. A mi también me hubiera gustado esa llamada y darme la vuelta, pero no me puedo quejar estando de vacaciones. Mi síndrome comienza con un desayuno con dos buenos amigos y mi Jose, así que buen comienzo augura buena semana. Eso sí, los niños no perdonan.
Sobre que siempre queremos más, también es verdad, pero supongo que si lo tuvieramos no podríamos apreciar de veras los buenos ratos que pasamos descansando y divirtiéndonos.
En fin, que también me gusta José Mercé.
Besitos sin gluten.
He tenido la misma sensación que tú al despertarme, sólo que sin los niños ...jejejee.
besos y que tengas una buena semana!!!
LINA
Que corto se me ha hecho este puente!
Por lo menos se nos hace mas cortita la semanita.
Besitos.
Como me suena!!, bonita reflexión...pero que poco dura cuando la realidad aparece por la puerta...que disfrutes de una buena semana!!!bss
Piensa que esta semanita es mas corta!
Zepequeña.
ya queda menons para el puente de noviemre, diciembre...y por supuesto el gran puente de Andalucia!!! ya los tengo señalados en el calendario!
besos!
AMén querida, amén...debería ser siempre así: una semana de 4 días laborables y 3 festivos: justo y equilibrado!
Besos,
Makiiiiiiii
¡Que duro, es verdad! Y eso que yo me he pasado el puente poniendo a tono la casa y recogiendo armarios :S
La verdad es que se despista una! jjaja
Besitos ;)
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